Copyringht(C)2006-2016 Parroquia San Pedro Apóstol, Teléfono 51 2531009 Huasco - Región de Atacama, CHILE
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Respecto al embate de la Nueva Era y sus aliados, Reiki, Yoga, Zen, etc. y las sectas, Rosacruces, Masonería, Mormones, Testigos de Jehová, Satanismo, Meditación Trascendental etc., de los peligros que conlleva para un cristiano que las quiera practicar, ¿por qué?..
La era nueva, los engaños de siempre…
El estudio es un informe provisional. Es el fruto de la reflexión común del Grupo de Trabajo sobre Nuevos Movimientos Religiosos, compuesto por miembros de diferentes dicasterios de la Santa Sede: los Consejos Pontificios de la Cultura y para el Diálogo Interreligioso, que son los redactores principales de este proyecto; la Congregación para la Evangelización de los Pueblos y el Consejo Pontificio para la Promoción de la Unidad de los Cristianos.
La era nueva, los engaños de siempre…
El estudio es un informe provisional. Es el fruto de la reflexión común del Grupo de Trabajo sobre Nuevos Movimientos Religiosos, compuesto por miembros de diferentes dicasterios de la Santa Sede: los Consejos Pontificios de la Cultura y para el Diálogo Interreligioso, que son los redactores principales de este proyecto; la Congregación para la Evangelización de los Pueblos y el Consejo Pontificio para la Promoción de la Unidad de los Cristianos.
Red Iberoamericana de Estudio de las Sectas
El portal católico Aleteia -apoyado por la Santa Sede (Consejos Pontificios para las Comunicaciones Sociales y para la Promoción de la Nueva Evangelización)- ofrece la respuesta a este tema, por parte del miembro de la RIES, el sacerdote D. Luis Santamaría.
El portal católico Aleteia -apoyado por la Santa Sede (Consejos Pontificios para las Comunicaciones Sociales y para la Promoción de la Nueva Evangelización)- ofrece la respuesta a este tema, por parte del miembro de la RIES, el sacerdote D. Luis Santamaría.
¿Qué es CISNE?
Somos un equipo de profesionistas católicos que brinda asesoría y capacitación a los bautizados sobre el peligro que para su fe y vida traen consigo las tesis y prácticas del movimiento Nueva Era. Colaboramos por amor a Cristo con nuestra Iglesia Católica a la defensa del Evangelio, de la verdad y de la sana doctrina amenazados por este fenómeno.
Somos un equipo de profesionistas católicos que brinda asesoría y capacitación a los bautizados sobre el peligro que para su fe y vida traen consigo las tesis y prácticas del movimiento Nueva Era. Colaboramos por amor a Cristo con nuestra Iglesia Católica a la defensa del Evangelio, de la verdad y de la sana doctrina amenazados por este fenómeno.
Consejo de Pastoral Parroquial
El Consejo de Pastoral Parroquial, es una importante instancia de participación, de reflexión y de toma de decisiones pastorales, conducentes a la comunión eclesial; es representativo de las variadas áreas y grupos vitales de la parroquia, donde se deja ver una pastoral de conjunto.
El Consejo de Pastoral Parroquial, es una importante instancia de participación, de reflexión y de toma de decisiones pastorales, conducentes a la comunión eclesial; es representativo de las variadas áreas y grupos vitales de la parroquia, donde se deja ver una pastoral de conjunto.
Tiempo Pascual
Los cincuenta días que van desde el domingo de resurrección hasta el domingo de Pentecostés.
El Domingo de Resurrección o de Pascua es la fiesta más importante para todos los católicos, ya que con la Resurrección de Jesús es cuando adquiere sentido toda nuestra religión.
Cristo triunfó sobre la muerte y con esto nos abrió las puertas del Cielo. En la Misa dominical recordamos de una manera especial esta gran alegría. Se enciende el Cirio Pascual que representa la luz de Cristo resucitado y que permanecerá prendido hasta el día de la Ascensión, cuando Jesús sube al Cielo.
Los cincuenta días que van desde el domingo de resurrección hasta el domingo de Pentecostés.
El Domingo de Resurrección o de Pascua es la fiesta más importante para todos los católicos, ya que con la Resurrección de Jesús es cuando adquiere sentido toda nuestra religión.
Cristo triunfó sobre la muerte y con esto nos abrió las puertas del Cielo. En la Misa dominical recordamos de una manera especial esta gran alegría. Se enciende el Cirio Pascual que representa la luz de Cristo resucitado y que permanecerá prendido hasta el día de la Ascensión, cuando Jesús sube al Cielo.
La Sagrada Escritura ha sido dividida, desde el Concilio Vaticano II, en tres ciclos completos de lecturas, de tal manera que quien asistiera a Misa todos los días, durante tres años seguidos, conseguiría escuchar casi toda la Palabra de Dios.
Recuerde: Lo más grande que puede hacer persona alguna es celebrar, experimentar y prolongar en la vida diaria la presencia real del Señor en la liturgia, Lea lo que dicen los santos sobre la eucaristía. Ustedes ni se imaginan las maravillas que quiere realizar el Señor en ustedes, en su familia siempre y cuando que estén conscientemente abiertos a la acción divina de la liturgia sabiendo lo que hacen. Piensen en eso: se prolongará por toda la eternidad (vea el Apocalipsis). Y cada domingo es una re-actualización de la Fiesta de las Fiestas: La Resurrección del Señor hoy. Además, ¿es consciente que forma parte de una Iglesia doméstica?
Recuerde: Lo más grande que puede hacer persona alguna es celebrar, experimentar y prolongar en la vida diaria la presencia real del Señor en la liturgia, Lea lo que dicen los santos sobre la eucaristía. Ustedes ni se imaginan las maravillas que quiere realizar el Señor en ustedes, en su familia siempre y cuando que estén conscientemente abiertos a la acción divina de la liturgia sabiendo lo que hacen. Piensen en eso: se prolongará por toda la eternidad (vea el Apocalipsis). Y cada domingo es una re-actualización de la Fiesta de las Fiestas: La Resurrección del Señor hoy. Además, ¿es consciente que forma parte de una Iglesia doméstica?
La cercanía del Jubileo extraordinario de la Misericordia me permite centrar la atención en algunos puntos sobre los que considero importante intervenir para facilitar que la celebración del Año Santo sea un auténtico momento de encuentro con la misericordia de Dios para todos los creyentes. Es mi deseo, en efecto, que el Jubileo sea experiencia viva de la cercanía del Padre, como si se quisiese tocar con la mano su ternura, para que se fortalezca la fe de cada creyente y, así, el testimonio sea cada vez más eficaz.
Mi pensamiento se dirige, en primer lugar, a todos los fieles que en cada diócesis, o como peregrinos en Roma, vivirán la gracia del Jubileo.
Mi pensamiento se dirige, en primer lugar, a todos los fieles que en cada diócesis, o como peregrinos en Roma, vivirán la gracia del Jubileo.
1% Contribución a la Iglesia, tu Iglesia
El 1% de la Contribución a la Iglesia, tu Iglesia, es deber moral de todos los bautizados y hombres de buena voluntad, con lo cual la Iglesia lleva adelante su misión de anunciar la Buena Noticia del Evangelio a todos los Pueblos (Mt 28, 19 - 21)
Movidos por la acción del Espíritu Santo y guiados por el ejemplo de Jesús, la Iglesia va en busca del que sufre, sacia su habre de pan y se le anuncia el Evangelio (Mateo 11,3-5).
Es por esto, que la contribución del 1% es un signo de pertenencia a la Iglesia. Los católicos somos co-responsables, con nuestros talentos y nuestro aporte material, en el cumplimiento de la misión entregada por Jesucristo: “Vayan y hagan discípulos míos a todos los pueblos de la Tierra” (Mt 28, 19- 21)
El 1% de la Contribución a la Iglesia, tu Iglesia, es deber moral de todos los bautizados y hombres de buena voluntad, con lo cual la Iglesia lleva adelante su misión de anunciar la Buena Noticia del Evangelio a todos los Pueblos (Mt 28, 19 - 21)
Movidos por la acción del Espíritu Santo y guiados por el ejemplo de Jesús, la Iglesia va en busca del que sufre, sacia su habre de pan y se le anuncia el Evangelio (Mateo 11,3-5).
Es por esto, que la contribución del 1% es un signo de pertenencia a la Iglesia. Los católicos somos co-responsables, con nuestros talentos y nuestro aporte material, en el cumplimiento de la misión entregada por Jesucristo: “Vayan y hagan discípulos míos a todos los pueblos de la Tierra” (Mt 28, 19- 21)
Haga su aporte del 1% de la contribución a su Iglesia, ahora de manera On-Line directamente a su parroquia San Pedro Apóstol de Huasco, a través del sistema PagoMaster que hemos implentado para usted.
San Pedro Apóstol, Patrono
(Simón o Simeón; Betsaida, Galilea, ? - Roma ?, h. 64/67). Apóstol de Jesucristo y primer jefe de su Iglesia. Era un pescador del mar de Galilea, hasta que dejó su casa de Cafarnaúm para unirse a los discípulos de Jesús en los primeros momentos de su predicación; junto con él se unieron a Jesús otros pescadores de la localidad, como su propio hermano Andrés y los dos hijos de Zebedeo, Santiago y Juan, todos los cuales formaron parte del núcleo originario de los doce apóstoles.
San Pedro carecía de estudios, pero pronto se distinguió entre los discípulos por su fuerte personalidad y su cercanía al maestro, erigiéndose frecuentemente en portavoz del grupo. A través de los Evangelios puede trazarse un perfil bastante completo de su personalidad. Pedro es sencillo, generoso e impulsivo en sus intervenciones, que a veces denotan una incomprensión del auténtico mensaje del maestro. Jesús, por su parte, muestra por Simón una predilección que aparece patente desde el primer encuentro. Junto con Santiago y Juan, Pedro participaba en toda la actividad de Jesús, asistiendo incluso a episodios íntimos de los que quedaban excluidos los demás apóstoles. En Cafarnaúm, Jesús debió ser a menudo huésped de la familia de la que procedía la mujer de Pedro.
El sobrenombre de Pedro se lo puso Jesús al señalarle como la «piedra» (petra en latín) sobre la que habría de edificar su Iglesia. En Cesarea de Filipos, al nordeste del lago Tiberíades, tuvo lugar el episodio en que San Pedro afirmó la divinidad de Jesús: "Tú eres Cristo, el Hijo de Dios vivo" (Mat. 16, 16). Jesús juzgó la afirmación como efecto de una iluminación de lo alto y confirió a Pedro la máxima autoridad: "Bienaventurado eres tú, Simón, hijo de Jonás, porque no te ha revelado eso la carne y la sangre, sino mi Padre que está en los cielos. Y yo te digo que tú eres Pedro, y que sobre esta piedra edificaré mi Iglesia; las puertas del infierno no prevalecerán contra ella. Te daré las llaves del reino de los cielos. Y todo lo que atares sobre la tierra será también atado en los cielos; y todo lo que desatares sobre la tierra, será también desatado en los cielos" (Mat. 16, 17-19).
Personalidad impetuosa y sincera, San Pedro tuvo también momentos de debilidad. Según el relato evangélico, San Pedro negó hasta tres veces conocer a Jesús la noche en que éste fue arrestado, cumpliendo una profecía que le había hecho el maestro; pero, arrepentido de aquella negación, su fe ya no volvió a flaquear y, después de la crucifixión y la resurrección, fue privilegiado con la primera aparición de Jesús y se dedicó a propagar sus enseñanzas.
Tras la muerte de Jesús (hacia el año 30 d. C.), San Pedro se convirtió en el líder indiscutido de la diminuta comunidad de los primeros creyentes cristianos de Palestina por espacio de quince años: dirigía las oraciones, respondía a las acusaciones de herejía lanzadas por los rabinos ortodoxos y admitía a los nuevos adeptos (incluidos los primeros no judíos).
Hacia el año 44 fue encarcelado por orden del rey Herodes Agripa, pero consiguió escapar y abandonó Jerusalén, dedicándose a propagar la nueva religión por Siria, Asia Menor y Grecia. En esa época, probablemente, su liderazgo fue menos evidente, disputándole la primacía entre los cristianos otros apóstoles, como Pablo o Santiago. Asistió al llamado Concilio de Jerusalén (48 o 49), en el cual apoyó la línea de San Pablo de abrir el cristianismo a los gentiles, frente a quienes lo seguían ligando a la tradición judía.
Los últimos años de la vida de San Pedro están envueltos en la leyenda, pues sólo pueden reconstruirse a partir de relatos muy posteriores. Posiblemente se trasladó a Roma, donde habría ejercido un largo apostolado justificativo de la futura sede del Papado: la Iglesia romana considera a San Pedro el primero de sus papas. Allí fue detenido durante las persecuciones de Nerón contra los cristianos, y murió crucificado. Una tradición poco contrastada sitúa su tumba en la colina del Vaticano, lugar en donde el emperador Constantino hizo levantar en el siglo IV la basílica de San Pedro y San Pablo.
Las epístolas de San Pedro
Las dos epístolas de San Pedro que se conservan forman parte, en el Nuevo Testamento, de las siete epístolas llamadas católicas que siguen a las catorce de San Pablo. La primera fue escrita en lengua griega, tal vez en el año 64, y va dirigida a los hebreos dispersos del Ponto, de Galacia, Capadocia, Asia y Bitinia. Está fechada en Babilonia (V, 13), topónimo que, como en el Apocalipsis, indica tal vez Roma. Destaca en ella un parecido de pensamientos, de expresiones y de enseñanzas con las epístolas de San Pablo. Enérgica, vehemente y densa en sentencias, su estilo es conciso, elevado, autoritario y dulce a un mismo tiempo.
El propósito de la carta es exhortativo. En una primera serie de exhortaciones, San Pedro expone la dignidad del cristiano, la sublimidad de su vocación y la santidad de la vida que debe ser su consecuencia (I, 1-II, 10). Desde el capítulo II, 11 al IV, 6, con graciosas comparaciones, el apóstol recomienda obediencia, paciencia, respeto a la autoridad, amor a los enemigos y concordia entre los hermanos. La tercera y última parte (IV, 7-V, 14) contiene instrucciones para una vida pura y santa, primero para todos indistintamente y después para los pastores de almas en particular. En toda la epístola está presente Jesús, con sus padecimientos y sus consejos.
La segunda epístola, escrita aparentemente unos meses después, se presenta como una continuación de la primera y va dirigida a las mismas personas, según expresa el autor con las palabras "He aquí la segunda carta que os escribo" (III, 1). Generalmente se presume que San Pedro la dictó poco antes de su martirio, como se puede deducir del apartado I, 14. En la primera parte (I, 1-21), San Pedro recuerda los principios generales según los cuales deben los cristianos atenerse tenazmente a la doctrina recibida y a la práctica de las virtudes. En la segunda (II, 1-22) condena máximas y costumbres de los falsos doctores, cuya perversión de mente y corazón describe en fuertes términos y enérgico estilo. En la última (III, 1-13), ataca los frívolos argumentos con que aquellos sectarios se proponen desacreditar la doctrina de los fieles.
(Simón o Simeón; Betsaida, Galilea, ? - Roma ?, h. 64/67). Apóstol de Jesucristo y primer jefe de su Iglesia. Era un pescador del mar de Galilea, hasta que dejó su casa de Cafarnaúm para unirse a los discípulos de Jesús en los primeros momentos de su predicación; junto con él se unieron a Jesús otros pescadores de la localidad, como su propio hermano Andrés y los dos hijos de Zebedeo, Santiago y Juan, todos los cuales formaron parte del núcleo originario de los doce apóstoles.
San Pedro carecía de estudios, pero pronto se distinguió entre los discípulos por su fuerte personalidad y su cercanía al maestro, erigiéndose frecuentemente en portavoz del grupo. A través de los Evangelios puede trazarse un perfil bastante completo de su personalidad. Pedro es sencillo, generoso e impulsivo en sus intervenciones, que a veces denotan una incomprensión del auténtico mensaje del maestro. Jesús, por su parte, muestra por Simón una predilección que aparece patente desde el primer encuentro. Junto con Santiago y Juan, Pedro participaba en toda la actividad de Jesús, asistiendo incluso a episodios íntimos de los que quedaban excluidos los demás apóstoles. En Cafarnaúm, Jesús debió ser a menudo huésped de la familia de la que procedía la mujer de Pedro.
El sobrenombre de Pedro se lo puso Jesús al señalarle como la «piedra» (petra en latín) sobre la que habría de edificar su Iglesia. En Cesarea de Filipos, al nordeste del lago Tiberíades, tuvo lugar el episodio en que San Pedro afirmó la divinidad de Jesús: "Tú eres Cristo, el Hijo de Dios vivo" (Mat. 16, 16). Jesús juzgó la afirmación como efecto de una iluminación de lo alto y confirió a Pedro la máxima autoridad: "Bienaventurado eres tú, Simón, hijo de Jonás, porque no te ha revelado eso la carne y la sangre, sino mi Padre que está en los cielos. Y yo te digo que tú eres Pedro, y que sobre esta piedra edificaré mi Iglesia; las puertas del infierno no prevalecerán contra ella. Te daré las llaves del reino de los cielos. Y todo lo que atares sobre la tierra será también atado en los cielos; y todo lo que desatares sobre la tierra, será también desatado en los cielos" (Mat. 16, 17-19).
Personalidad impetuosa y sincera, San Pedro tuvo también momentos de debilidad. Según el relato evangélico, San Pedro negó hasta tres veces conocer a Jesús la noche en que éste fue arrestado, cumpliendo una profecía que le había hecho el maestro; pero, arrepentido de aquella negación, su fe ya no volvió a flaquear y, después de la crucifixión y la resurrección, fue privilegiado con la primera aparición de Jesús y se dedicó a propagar sus enseñanzas.
Tras la muerte de Jesús (hacia el año 30 d. C.), San Pedro se convirtió en el líder indiscutido de la diminuta comunidad de los primeros creyentes cristianos de Palestina por espacio de quince años: dirigía las oraciones, respondía a las acusaciones de herejía lanzadas por los rabinos ortodoxos y admitía a los nuevos adeptos (incluidos los primeros no judíos).
Hacia el año 44 fue encarcelado por orden del rey Herodes Agripa, pero consiguió escapar y abandonó Jerusalén, dedicándose a propagar la nueva religión por Siria, Asia Menor y Grecia. En esa época, probablemente, su liderazgo fue menos evidente, disputándole la primacía entre los cristianos otros apóstoles, como Pablo o Santiago. Asistió al llamado Concilio de Jerusalén (48 o 49), en el cual apoyó la línea de San Pablo de abrir el cristianismo a los gentiles, frente a quienes lo seguían ligando a la tradición judía.
Los últimos años de la vida de San Pedro están envueltos en la leyenda, pues sólo pueden reconstruirse a partir de relatos muy posteriores. Posiblemente se trasladó a Roma, donde habría ejercido un largo apostolado justificativo de la futura sede del Papado: la Iglesia romana considera a San Pedro el primero de sus papas. Allí fue detenido durante las persecuciones de Nerón contra los cristianos, y murió crucificado. Una tradición poco contrastada sitúa su tumba en la colina del Vaticano, lugar en donde el emperador Constantino hizo levantar en el siglo IV la basílica de San Pedro y San Pablo.
Las epístolas de San Pedro
Las dos epístolas de San Pedro que se conservan forman parte, en el Nuevo Testamento, de las siete epístolas llamadas católicas que siguen a las catorce de San Pablo. La primera fue escrita en lengua griega, tal vez en el año 64, y va dirigida a los hebreos dispersos del Ponto, de Galacia, Capadocia, Asia y Bitinia. Está fechada en Babilonia (V, 13), topónimo que, como en el Apocalipsis, indica tal vez Roma. Destaca en ella un parecido de pensamientos, de expresiones y de enseñanzas con las epístolas de San Pablo. Enérgica, vehemente y densa en sentencias, su estilo es conciso, elevado, autoritario y dulce a un mismo tiempo.
El propósito de la carta es exhortativo. En una primera serie de exhortaciones, San Pedro expone la dignidad del cristiano, la sublimidad de su vocación y la santidad de la vida que debe ser su consecuencia (I, 1-II, 10). Desde el capítulo II, 11 al IV, 6, con graciosas comparaciones, el apóstol recomienda obediencia, paciencia, respeto a la autoridad, amor a los enemigos y concordia entre los hermanos. La tercera y última parte (IV, 7-V, 14) contiene instrucciones para una vida pura y santa, primero para todos indistintamente y después para los pastores de almas en particular. En toda la epístola está presente Jesús, con sus padecimientos y sus consejos.
La segunda epístola, escrita aparentemente unos meses después, se presenta como una continuación de la primera y va dirigida a las mismas personas, según expresa el autor con las palabras "He aquí la segunda carta que os escribo" (III, 1). Generalmente se presume que San Pedro la dictó poco antes de su martirio, como se puede deducir del apartado I, 14. En la primera parte (I, 1-21), San Pedro recuerda los principios generales según los cuales deben los cristianos atenerse tenazmente a la doctrina recibida y a la práctica de las virtudes. En la segunda (II, 1-22) condena máximas y costumbres de los falsos doctores, cuya perversión de mente y corazón describe en fuertes términos y enérgico estilo. En la última (III, 1-13), ataca los frívolos argumentos con que aquellos sectarios se proponen desacreditar la doctrina de los fieles.
Fecha Nacimiento: 06 de Abril de 1945 en Artaiz, Navarra - España
Fecha Ordenación Sacerdotal: 30 de Marzo de 1968, por Mons. Ignacio Larrañaga O,F.M. Cap.
Fecha Ordenación Episcopal: 18 de Octubre de 2014, en Catedral de Copiapó
Monseñor: Celestino Aós Braco, O.F.M.Cap.
Lema Episcopal: Amar y Servir
Biografía:
Monseñor Celestino Aós Braco, O.F.M. Cap., nació el 6 de abril de 1945 en Artaiz, Navarra (España) Cursó la enseñanza básica y media en la Escuela Nacional mixta de Artaiz. El 16 de agosto de 1955 ingresó como aspirante en la Orden de los Frailes Menores Capuchinos en su tierra natal.
Entre 1960 y 1963 realizó los estudios filosóficos en Zaragoza.
El 14 de agosto de 1963 ingresó al Noviciado de Sanguesa, realizando el 15 de agosto de 1964 la Primera Profesión religiosa.
Entre 1964 y 1968 completó los estudios teológicos en Pamplona.
El 16 de septiembre de 1967 en Pamplona hizo su Profesión Perpetua.
El 30 de marzo de 1968 ha sido ordenado sacerdote por S.E. Mons. Ignacio Larrañaga, O.F.M.Cap.
Después de la ordenación sacerdotal fue educador y profesor en Lecaroz y vicario en Tudela (Navarra).
Entre 1972 y 1980 frecuentó varios cursos a nivel académico, primero en la Universidad de Zaragoza y después en la Universidad de Barcelona, donde obtuvo la Licenciatura en Psicología.
Fecha Ordenación Sacerdotal: 30 de Marzo de 1968, por Mons. Ignacio Larrañaga O,F.M. Cap.
Fecha Ordenación Episcopal: 18 de Octubre de 2014, en Catedral de Copiapó
Monseñor: Celestino Aós Braco, O.F.M.Cap.
Lema Episcopal: Amar y Servir
Biografía:
Monseñor Celestino Aós Braco, O.F.M. Cap., nació el 6 de abril de 1945 en Artaiz, Navarra (España) Cursó la enseñanza básica y media en la Escuela Nacional mixta de Artaiz. El 16 de agosto de 1955 ingresó como aspirante en la Orden de los Frailes Menores Capuchinos en su tierra natal.
Entre 1960 y 1963 realizó los estudios filosóficos en Zaragoza.
El 14 de agosto de 1963 ingresó al Noviciado de Sanguesa, realizando el 15 de agosto de 1964 la Primera Profesión religiosa.
Entre 1964 y 1968 completó los estudios teológicos en Pamplona.
El 16 de septiembre de 1967 en Pamplona hizo su Profesión Perpetua.
El 30 de marzo de 1968 ha sido ordenado sacerdote por S.E. Mons. Ignacio Larrañaga, O.F.M.Cap.
Después de la ordenación sacerdotal fue educador y profesor en Lecaroz y vicario en Tudela (Navarra).
Entre 1972 y 1980 frecuentó varios cursos a nivel académico, primero en la Universidad de Zaragoza y después en la Universidad de Barcelona, donde obtuvo la Licenciatura en Psicología.
Moseñor Celestino Aós Braco, O.F.M. Cap., Obispo Diócesis de Copiapó
Entre 1980 y 1981 frecuentó la Pontificia Universidad Católica de Chile, gracias a una beca internacional de investigación en psicología. Luego regresado a España, fue Profesor en Pamplona y, posteriormente, fue Vicario cooperador en Zaragoza.
En 1983 fue destinado a la Provincia de Chile, siendo nombrado Vicario parroquial en la Parroquia de Longaví (diócesis de Linares), confiada a los Padres Capuchinos.
En 1985 fue elegido Superior de la comunidad capuchina de Los Ángeles (Diócesis de Santa María de los Ángeles).
En 1995 fue nombrado Párroco de la Parroquia San Miguel en Viña del Mar (Diócesis de Valparaíso), siendo además Superior de la Comunidad de la Orden de la Frailes Menores Capuchinos en la localidad de Recreo, siempre en Viña del Mar.
Durante sus años de ministerio en la Diócesis de Valparaíso ejerció el cargo de Vicario Episcopal para los Institutos Femeninos de Vida Consagrada y fue Miembro del Consejo Episcopal.
Desde el año 2008 es Vicario parroquial en la Parroquia San Francisco de Asís en la ciudad de Los Ángeles (Diócesis de Santa María de los Ángeles).
Entre otros cargos que ha desempeñado figuran:
-Tesorero de la Asociación Chilena de Derecho canónico.
-Miembro de varios Tribunales Eclesiásticos chilenos, en primer lugar en el Tribunal de Valparaíso, donde colaboró como Promotor de Justicia; posteriormente trabajó en el Tribunal Interdiocesano de Concepción, donde actuó como psicólogo y sucesivamente como Juez, cargo que todavía desempeña.
- Miembro de Tribunales Especiales creados para estudiar: el milagro de la canonización de San Alberto Hurtado; la beatificación del Beato Tomás Reggio, Arzobispo de Génova y Fundador de la Congregación de Hijas de Santa Marta; el proceso histórico y proceso de presunto milagro de la “Beatita Benavides”.
En 1983 fue destinado a la Provincia de Chile, siendo nombrado Vicario parroquial en la Parroquia de Longaví (diócesis de Linares), confiada a los Padres Capuchinos.
En 1985 fue elegido Superior de la comunidad capuchina de Los Ángeles (Diócesis de Santa María de los Ángeles).
En 1995 fue nombrado Párroco de la Parroquia San Miguel en Viña del Mar (Diócesis de Valparaíso), siendo además Superior de la Comunidad de la Orden de la Frailes Menores Capuchinos en la localidad de Recreo, siempre en Viña del Mar.
Durante sus años de ministerio en la Diócesis de Valparaíso ejerció el cargo de Vicario Episcopal para los Institutos Femeninos de Vida Consagrada y fue Miembro del Consejo Episcopal.
Desde el año 2008 es Vicario parroquial en la Parroquia San Francisco de Asís en la ciudad de Los Ángeles (Diócesis de Santa María de los Ángeles).
Entre otros cargos que ha desempeñado figuran:
-Tesorero de la Asociación Chilena de Derecho canónico.
-Miembro de varios Tribunales Eclesiásticos chilenos, en primer lugar en el Tribunal de Valparaíso, donde colaboró como Promotor de Justicia; posteriormente trabajó en el Tribunal Interdiocesano de Concepción, donde actuó como psicólogo y sucesivamente como Juez, cargo que todavía desempeña.
- Miembro de Tribunales Especiales creados para estudiar: el milagro de la canonización de San Alberto Hurtado; la beatificación del Beato Tomás Reggio, Arzobispo de Génova y Fundador de la Congregación de Hijas de Santa Marta; el proceso histórico y proceso de presunto milagro de la “Beatita Benavides”.
Escudo Espiscopal Moseñor Celestino Aós Braco, O.F.M. Cap.
El 25 de julio de 2014 ha sido nombrado Obispo de la diócesis de Copiapó.
El 18 de Octubre de 2014 a las 17:00 hrs. se inició la solemne Eucaristía presidida por el Nuncio Apostólico, Monseñor Ivo Scapolo, quien consagró Obispo de la Iglesia Católica a Monseñor Celestino Aós Braco, donde concelebraron 20 Obispos de todo el país, Sacerdotes y Diáconos de la diócesis de Copiapó e invitados de otras latitudes. Acto seguido tomó posesión de la Diócesis de Copiapó, rodeado de todo el pueblo de Dios que peregrina en esta diócesis. Agradeció al Señor “que ha hecho grandes cosas en mí” dijo, y también dio las gracias al papa Francisco, a su familia sanguínea y religiosa como los son los Capuchinos, también a todas las personas que lo acompañaron, especialmente a los obispos, y a quienes viajaron desde los lugares más distantes de la diócesis, y desde Valparaíso y Los Ángeles. Tuvo palabras de reconocimiento a los jóvenes que estuvieron en el equipo de servicio. “No se cansen de seguir a Cristo” les dijo, y agregó que “vale la pena ser sacerdote”.
El 18 de Octubre de 2014 a las 17:00 hrs. se inició la solemne Eucaristía presidida por el Nuncio Apostólico, Monseñor Ivo Scapolo, quien consagró Obispo de la Iglesia Católica a Monseñor Celestino Aós Braco, donde concelebraron 20 Obispos de todo el país, Sacerdotes y Diáconos de la diócesis de Copiapó e invitados de otras latitudes. Acto seguido tomó posesión de la Diócesis de Copiapó, rodeado de todo el pueblo de Dios que peregrina en esta diócesis. Agradeció al Señor “que ha hecho grandes cosas en mí” dijo, y también dio las gracias al papa Francisco, a su familia sanguínea y religiosa como los son los Capuchinos, también a todas las personas que lo acompañaron, especialmente a los obispos, y a quienes viajaron desde los lugares más distantes de la diócesis, y desde Valparaíso y Los Ángeles. Tuvo palabras de reconocimiento a los jóvenes que estuvieron en el equipo de servicio. “No se cansen de seguir a Cristo” les dijo, y agregó que “vale la pena ser sacerdote”.
Fecha Nacimiento: 05-10-1936
Fecha Ordenación Sacerdotal: 22-03-1964
Fecha Ordenación Episcopal: 01-07-2001
Padre Obispo Gaspar Quintana Jorquera,CMF, Obispo Emerito Diócesis de Copiapó
Lema Episcopal: Conservar la palabra en el corazón
Fecha Ordenación Sacerdotal: 22-03-1964
Fecha Ordenación Episcopal: 01-07-2001
Padre Obispo Gaspar Quintana Jorquera,CMF, Obispo Emerito Diócesis de Copiapó
Lema Episcopal: Conservar la palabra en el corazón
Biografía:
Monseñor Gaspar Quintana Jorquera nació en Santiago el 5 de octubre de 1936, hijo de Gaspar Quintana y Elena Jorquera. Su primer contacto con la Congregación Religiosa “Misioneros Hijos del Inmaculado Corazón de María, CMF (Cordis Mariae Filius)” conocida como los Misioneros Claretianos , le vino a través de los misioneros que atendían la Basílica del “Corazón de María“. Hizo su primera profesión religiosa el 02 de Febrero de 1954, día de la Presentación del Señor, y en la misma fecha del año 1958 emitía la profesión perpetua. Ha cursado filosofía y teología en los Seminarios de Villa Claret, Córdoba (Argentina) y en el Seminario Claretiano de Santiago (Chile), recibiendo la ordenación sacerdotal el 22 de marzo de 1964.
Durante el sexenio 1991-1997 ocupó el cargo de Secretario General de su Congregación en Roma. Doctorado en Teología con especialización en Mariología en Roma, es titulado en Pedagogía Musical por la Universidad de Chile. Amante del arte y del deporte, tiene título de entrenador de fútbol. En el momento de su nombramiento episcopal ocupaba el cargo de Superior Provincial de los Misioneros Claretianos en Chile.
El 01 de julio de 2001 fue ordenado Obispo en la Basílica del Corazón de María de Santiago, y el 08 del mismo mes, tomó posesión de la Diócesis de Copiapó en la Catedral de la misma.
Monseñor Gaspar Quintana Jorquera nació en Santiago el 5 de octubre de 1936, hijo de Gaspar Quintana y Elena Jorquera. Su primer contacto con la Congregación Religiosa “Misioneros Hijos del Inmaculado Corazón de María, CMF (Cordis Mariae Filius)” conocida como los Misioneros Claretianos , le vino a través de los misioneros que atendían la Basílica del “Corazón de María“. Hizo su primera profesión religiosa el 02 de Febrero de 1954, día de la Presentación del Señor, y en la misma fecha del año 1958 emitía la profesión perpetua. Ha cursado filosofía y teología en los Seminarios de Villa Claret, Córdoba (Argentina) y en el Seminario Claretiano de Santiago (Chile), recibiendo la ordenación sacerdotal el 22 de marzo de 1964.
Durante el sexenio 1991-1997 ocupó el cargo de Secretario General de su Congregación en Roma. Doctorado en Teología con especialización en Mariología en Roma, es titulado en Pedagogía Musical por la Universidad de Chile. Amante del arte y del deporte, tiene título de entrenador de fútbol. En el momento de su nombramiento episcopal ocupaba el cargo de Superior Provincial de los Misioneros Claretianos en Chile.
El 01 de julio de 2001 fue ordenado Obispo en la Basílica del Corazón de María de Santiago, y el 08 del mismo mes, tomó posesión de la Diócesis de Copiapó en la Catedral de la misma.
Moseñor Gaspar Quintana Jorquera CMF, Obispo Emerito Diócesis de Copiapó
El 18 de octubre de 2014, con emotivas palabras de agradecimientos a Dios y al pueblo de Dios que peregrina en Atacama, deja la responsabilidad de la conducción de la Diocesis de Copiapó, quedando como obispo emerito. El Nuncio apostólico monseñor Ivo Scapolo, tuvo palabras de agracedimiento por su fidelidad a Jesús y al Santo Padre que le confio esta responsabilidad en la Iglesia.
El Magisterio de la Iglesia, su infalibilidad La Iglesia, por especial asistencia de Dios, es infalible, sin posibilidad de error en su enseñanza.
El Magisterio
“Tú eres Pedro y sobre esta piedra edificaré mi Iglesia. Y las puertas del infierno no prevalecerán sobre ella. Lo que ates en la tierra quedará atado en el Cielo, lo que desates en la tierra quedará desatado en el Cielo.” (Mt 16,18)
Autor: Centro de Actualización Pedagógica
Catholic.net.
En busca de la verdad
John Douglas, antropólogo, es director de la Unidad de Ciencias de la Arqueología, Antropología y Paleontología que él mismo fundó, revolucionando estas ramas de la ciencia. Su trabajo consiste nada menos que en leer el pensamiento de nuestros antepasados muertos hace miles de años, para lograr un mayor conocimiento de su cultura y costumbres.
Pero Douglas no puede inventar que existió una civilización, si no tiene al menos una prueba de ello. Cuando los arqueólogos encuentran una prueba y se la entregan, Douglas la ve con detenimiento, la cuida para que nadie la toque o la destruya, la analiza detalladamente y de ella saca las conclusiones que luego da a conocer al mundo entero.
Douglas es el encargado oficial de descubrir la verdad en los casos de hallazgos arqueológicos, en cualquier parte del mundo. Su labor ha ayudado a descubrir las verdaderas razones del actuar del hombre moderno, partiendo de la forma como actuaban y pensaban sus antepasados...
El Magisterio
“Tú eres Pedro y sobre esta piedra edificaré mi Iglesia. Y las puertas del infierno no prevalecerán sobre ella. Lo que ates en la tierra quedará atado en el Cielo, lo que desates en la tierra quedará desatado en el Cielo.” (Mt 16,18)
Autor: Centro de Actualización Pedagógica
Catholic.net.
En busca de la verdad
John Douglas, antropólogo, es director de la Unidad de Ciencias de la Arqueología, Antropología y Paleontología que él mismo fundó, revolucionando estas ramas de la ciencia. Su trabajo consiste nada menos que en leer el pensamiento de nuestros antepasados muertos hace miles de años, para lograr un mayor conocimiento de su cultura y costumbres.
Pero Douglas no puede inventar que existió una civilización, si no tiene al menos una prueba de ello. Cuando los arqueólogos encuentran una prueba y se la entregan, Douglas la ve con detenimiento, la cuida para que nadie la toque o la destruya, la analiza detalladamente y de ella saca las conclusiones que luego da a conocer al mundo entero.
Douglas es el encargado oficial de descubrir la verdad en los casos de hallazgos arqueológicos, en cualquier parte del mundo. Su labor ha ayudado a descubrir las verdaderas razones del actuar del hombre moderno, partiendo de la forma como actuaban y pensaban sus antepasados...
Pedro, custodio de la Verdad
Del mismo modo que los arqueólogos llaman a Douglas para que les ayude a descubrir la verdad acerca de los hallazgos que encuentran en sus excavaciones, Dios también quiso nombrar un experto para la custodia de la Verdad. Este experto debía ser capaz de recibir la Verdad, conservarla, descubrirla en la Revelación y transmitirla a todos los hombres.
Fue entonces cuando Dios fundó la Iglesia sobre un hombre llamado Pedro y sobre los Apóstoles, y les dio al Espíritu Santo, experto en la Verdad, para que les ayudara a descubrirla, interpretarla, transmitirla y mantenerla intacta, sin invenciones o suposiciones erróneas.
Pedro y los Apóstoles recibieron de Cristo esta tarea y la extendieron a sus sucesores, el Papa y los obispos en comunión con él, quienes también tienen el auxilio del Espíritu Santo para garantizar que no se van a equivocar en sus interpretaciones.
El Papa y los obispos tienen la autoridad y la gracia para conservar, predicar e interpretar la Palabra de Dios. A esta tarea, exclusiva del Papa y los obispos, se le llama Magisterio de la Iglesia.
La palabra Magisterio se deriva de la misión que tiene la Iglesia de ser Maestra de los hombres. La Iglesia es la encargada de proteger a todo el Pueblo de Dios de las desviaciones y de los fallos, y de garantizarle una profesión sin error de la fe auténtica. El oficio del Magisterio está encaminado a velar para que el Pueblo de Dios permanezca en la Verdad.
Para cumplir este servicio, Cristo les ha dado a los pastores el carisma de infalibilidad en cuestiones de fe y de costumbres. Esto significa que, por la ayuda especial que tienen del Espíritu Santo, el Papa y los obispos en comunión con él, no pueden equivocarse cuando dicen algo en materia de fe o de moral. Más adelante explicaremos las diversas modalidades como se ejerce esta infalibilidad.
Las evidencias para conocer la Verdad
De la misma manera que Douglas no puede inventar que existió una civilización sin tener pruebas, la Iglesia no puede inventar verdades que no hayan sido reveladas por Dios, pues el Magisterio de la Iglesia está al servicio de la Palabra de Dios y de ella saca todas sus enseñanzas.
Las pruebas de la Verdad que transmite la Iglesia están en la Revelación, conformada por las Sagradas Escrituras y la Tradición.
Al igual que Douglas con sus evidencias, la Iglesia escucha la Palabra devotamente, la custodia de manera celosa, la explica fielmente y de esta única fuente saca todo lo que propone como revelado por Dios para ser creído.
Los cristianos, sabiendo que Cristo dejó la Verdad en manos de la Iglesia, recibimos con docilidad las indicaciones que nos dan nuestros pastores en nombre del mismo Cristo.
“El que os escucha a vosotros, a Mí mismo me escucha.” (Lc 10,16)
La Iglesia formada por todos los bautizados
El trabajo de Douglas se facilita cuando los arqueólogos que encuentran los restos son expertos también, ya que ellos adelantan las conclusiones. En la Iglesia, a veces sucede lo mismo. La Iglesia no es sólo la jerarquía: el Papa, los obispos y los sacerdotes, sino que está integrada por todos los bautizados que formamos una comunidad universal de salvación unida por el mismo Jesús.
Los bautizados que conformamos la Iglesia también contamos con el Espíritu Santo como guía por lo que hay verdades que nosotros mismos descubrimos con certeza.
Cuando desde los obispos hasta el último de los laicos cristianos afirman estar completamente de acuerdo en cuestiones de fe y moral por el sentido sobrenatural de la fe que les da el Espíritu Santo, entonces podemos estar seguros que esa verdad es parte de la Verdad revelada por Dios.
Dogma
Es una verdad contundente, coherente y vinculada con las otras verdades de la revelación, confirmada por el Magisterio de la Iglesia, que obliga a ser creída y aceptada por todos los cristianos.
Se define un dogma, cuando la totalidad del Pueblo de Dios (fieles, sacerdotes y obispos) cree con firmeza en una verdad esencial de nuestra fe, siempre y cuando el Magisterio de la Iglesia la confirme, iluminado por el Espíritu Santo, como una verdad contundente, coherente y vinculada con las otras verdades de la Revelación.
Algunos dogmas en los que creemos como verdad revelada por Dios son la Inmaculada Concepción de María y la presencia real de Jesucristo en la Eucaristía.
Los dogmas son luces en el camino de nuestra fe, lo iluminan y lo hacen seguro. Si tenemos una vida recta, cercana a Dios, nuestro corazón y nuestra inteligencia estarán abiertos a aceptar estos dogmas de fe y nos adheriremos a ellos con gusto.
Se pueden presentar problemas nuevos y situaciones difíciles, pero la Iglesia siempre encontrará una respuesta en su tesoro de sabiduría divina.
¿Puede equivocarse el Magisterio?
Como ya dijimos, la Iglesia, por especial asistencia de Dios, es infalible, sin posibilidad de error en su enseñanza cuando proclama solemne y universalmente la verdad en materia de fe y moral, ya que tiene asegurada la presencia y asistencia del Espíritu Santo.
Esta infalibilidad se ejerce de varias maneras:
El Papa goza de esta infalibilidad cuando, como Pastor y Maestro supremo de todos los fieles, proclama en forma solemne y definitiva una verdad de fe o de moral. Entonces decimos que el Papa habla ex-cáthedra.
El Colegio episcopal, integrado por los obispos, también goza del carisma de infalibilidad cuando ejerce su magisterio en unión con el Papa, sobre todo cuando participa en un concilio ecuménico.
El carisma de infalibilidad también se ejerce cuando la Iglesia propone por medio de su Magisterio supremo un dogma, algo que se debe aceptar como revelado por Dios para ser creído. Esta infalibilidad abarca todo el depósito de la Revelación.
Cuando los obispos enseñan en comunión con el Papa, proponiendo enseñanzas que conducen a un mejor entendimiento de la Revelación dentro del magisterio ordinario, no son infalibles pero los fieles debemos adherirnos a sus enseñanzas con obediencia y docilidad.
El Espíritu Santo ayuda a encontrar la verdad
En la vida de la Iglesia, gracias a la ayuda del Espíritu Santo, también se ha ido comprendiendo cada vez mejor la verdad revelada por Dios.
Sin embargo, esta mayor comprensión sirve de muy poco en la vida de la Iglesia, si los únicos que la ven con claridad son el Papa y los obispos.
Todos los fieles cristianos debemos trabajar para comprender la Verdad y aplicarla en nuestras vidas. ¿Cómo?
Recopilando las pruebas que esconden la Verdad.
Leyendo y estudiando la Sagrada Escritura y la Tradición.
Tratando de descubrir lo que Dios te dice en ellas.
Analizando con detenimiento estas pruebas, pensando cuál puede ser su significado. Esto lo lograrás repasando en tu corazón las verdades que conoces desde siempre y que, tal vez, no has asimiliado en toda su extensión. Por ejemplo, sabes desde niño que Dios es tu Padre, pero tal vez no has pensado en lo que significa en tu vida tener un Padre Omnipresente, Omnipotente… El día que esta verdad se meta en tu corazón, entonces toda tu vida cambiará.
Escuchando y obedeciendo los consejos de los expertos. Es decir, escuchando la palabra del Papa y los obispos que son los expertos autorizados por Dios para interpretar la verdad contenida en la Revelación. La Tradición, la Escritura y el Magisterio de la Iglesia están unidos y ligados, de tal modo que ninguno puede subsistir sin los otros.
“Si os mantenéis fieles a mi Palabra, seréis verdaderamente mis discípulos; así conoceréis la verdad y la verdad os hará libres.” (Jn 8,31-32)
Del mismo modo que los arqueólogos llaman a Douglas para que les ayude a descubrir la verdad acerca de los hallazgos que encuentran en sus excavaciones, Dios también quiso nombrar un experto para la custodia de la Verdad. Este experto debía ser capaz de recibir la Verdad, conservarla, descubrirla en la Revelación y transmitirla a todos los hombres.
Fue entonces cuando Dios fundó la Iglesia sobre un hombre llamado Pedro y sobre los Apóstoles, y les dio al Espíritu Santo, experto en la Verdad, para que les ayudara a descubrirla, interpretarla, transmitirla y mantenerla intacta, sin invenciones o suposiciones erróneas.
Pedro y los Apóstoles recibieron de Cristo esta tarea y la extendieron a sus sucesores, el Papa y los obispos en comunión con él, quienes también tienen el auxilio del Espíritu Santo para garantizar que no se van a equivocar en sus interpretaciones.
El Papa y los obispos tienen la autoridad y la gracia para conservar, predicar e interpretar la Palabra de Dios. A esta tarea, exclusiva del Papa y los obispos, se le llama Magisterio de la Iglesia.
La palabra Magisterio se deriva de la misión que tiene la Iglesia de ser Maestra de los hombres. La Iglesia es la encargada de proteger a todo el Pueblo de Dios de las desviaciones y de los fallos, y de garantizarle una profesión sin error de la fe auténtica. El oficio del Magisterio está encaminado a velar para que el Pueblo de Dios permanezca en la Verdad.
Para cumplir este servicio, Cristo les ha dado a los pastores el carisma de infalibilidad en cuestiones de fe y de costumbres. Esto significa que, por la ayuda especial que tienen del Espíritu Santo, el Papa y los obispos en comunión con él, no pueden equivocarse cuando dicen algo en materia de fe o de moral. Más adelante explicaremos las diversas modalidades como se ejerce esta infalibilidad.
Las evidencias para conocer la Verdad
De la misma manera que Douglas no puede inventar que existió una civilización sin tener pruebas, la Iglesia no puede inventar verdades que no hayan sido reveladas por Dios, pues el Magisterio de la Iglesia está al servicio de la Palabra de Dios y de ella saca todas sus enseñanzas.
Las pruebas de la Verdad que transmite la Iglesia están en la Revelación, conformada por las Sagradas Escrituras y la Tradición.
Al igual que Douglas con sus evidencias, la Iglesia escucha la Palabra devotamente, la custodia de manera celosa, la explica fielmente y de esta única fuente saca todo lo que propone como revelado por Dios para ser creído.
Los cristianos, sabiendo que Cristo dejó la Verdad en manos de la Iglesia, recibimos con docilidad las indicaciones que nos dan nuestros pastores en nombre del mismo Cristo.
“El que os escucha a vosotros, a Mí mismo me escucha.” (Lc 10,16)
La Iglesia formada por todos los bautizados
El trabajo de Douglas se facilita cuando los arqueólogos que encuentran los restos son expertos también, ya que ellos adelantan las conclusiones. En la Iglesia, a veces sucede lo mismo. La Iglesia no es sólo la jerarquía: el Papa, los obispos y los sacerdotes, sino que está integrada por todos los bautizados que formamos una comunidad universal de salvación unida por el mismo Jesús.
Los bautizados que conformamos la Iglesia también contamos con el Espíritu Santo como guía por lo que hay verdades que nosotros mismos descubrimos con certeza.
Cuando desde los obispos hasta el último de los laicos cristianos afirman estar completamente de acuerdo en cuestiones de fe y moral por el sentido sobrenatural de la fe que les da el Espíritu Santo, entonces podemos estar seguros que esa verdad es parte de la Verdad revelada por Dios.
Dogma
Es una verdad contundente, coherente y vinculada con las otras verdades de la revelación, confirmada por el Magisterio de la Iglesia, que obliga a ser creída y aceptada por todos los cristianos.
Se define un dogma, cuando la totalidad del Pueblo de Dios (fieles, sacerdotes y obispos) cree con firmeza en una verdad esencial de nuestra fe, siempre y cuando el Magisterio de la Iglesia la confirme, iluminado por el Espíritu Santo, como una verdad contundente, coherente y vinculada con las otras verdades de la Revelación.
Algunos dogmas en los que creemos como verdad revelada por Dios son la Inmaculada Concepción de María y la presencia real de Jesucristo en la Eucaristía.
Los dogmas son luces en el camino de nuestra fe, lo iluminan y lo hacen seguro. Si tenemos una vida recta, cercana a Dios, nuestro corazón y nuestra inteligencia estarán abiertos a aceptar estos dogmas de fe y nos adheriremos a ellos con gusto.
Se pueden presentar problemas nuevos y situaciones difíciles, pero la Iglesia siempre encontrará una respuesta en su tesoro de sabiduría divina.
¿Puede equivocarse el Magisterio?
Como ya dijimos, la Iglesia, por especial asistencia de Dios, es infalible, sin posibilidad de error en su enseñanza cuando proclama solemne y universalmente la verdad en materia de fe y moral, ya que tiene asegurada la presencia y asistencia del Espíritu Santo.
Esta infalibilidad se ejerce de varias maneras:
El Papa goza de esta infalibilidad cuando, como Pastor y Maestro supremo de todos los fieles, proclama en forma solemne y definitiva una verdad de fe o de moral. Entonces decimos que el Papa habla ex-cáthedra.
El Colegio episcopal, integrado por los obispos, también goza del carisma de infalibilidad cuando ejerce su magisterio en unión con el Papa, sobre todo cuando participa en un concilio ecuménico.
El carisma de infalibilidad también se ejerce cuando la Iglesia propone por medio de su Magisterio supremo un dogma, algo que se debe aceptar como revelado por Dios para ser creído. Esta infalibilidad abarca todo el depósito de la Revelación.
Cuando los obispos enseñan en comunión con el Papa, proponiendo enseñanzas que conducen a un mejor entendimiento de la Revelación dentro del magisterio ordinario, no son infalibles pero los fieles debemos adherirnos a sus enseñanzas con obediencia y docilidad.
El Espíritu Santo ayuda a encontrar la verdad
En la vida de la Iglesia, gracias a la ayuda del Espíritu Santo, también se ha ido comprendiendo cada vez mejor la verdad revelada por Dios.
Sin embargo, esta mayor comprensión sirve de muy poco en la vida de la Iglesia, si los únicos que la ven con claridad son el Papa y los obispos.
Todos los fieles cristianos debemos trabajar para comprender la Verdad y aplicarla en nuestras vidas. ¿Cómo?
Recopilando las pruebas que esconden la Verdad.
Leyendo y estudiando la Sagrada Escritura y la Tradición.
Tratando de descubrir lo que Dios te dice en ellas.
Analizando con detenimiento estas pruebas, pensando cuál puede ser su significado. Esto lo lograrás repasando en tu corazón las verdades que conoces desde siempre y que, tal vez, no has asimiliado en toda su extensión. Por ejemplo, sabes desde niño que Dios es tu Padre, pero tal vez no has pensado en lo que significa en tu vida tener un Padre Omnipresente, Omnipotente… El día que esta verdad se meta en tu corazón, entonces toda tu vida cambiará.
Escuchando y obedeciendo los consejos de los expertos. Es decir, escuchando la palabra del Papa y los obispos que son los expertos autorizados por Dios para interpretar la verdad contenida en la Revelación. La Tradición, la Escritura y el Magisterio de la Iglesia están unidos y ligados, de tal modo que ninguno puede subsistir sin los otros.
“Si os mantenéis fieles a mi Palabra, seréis verdaderamente mis discípulos; así conoceréis la verdad y la verdad os hará libres.” (Jn 8,31-32)
Padre Enrique Sarneguet Pastor
El domingo 12 de octubre de 2014 en solemne Eucaristía presidida por el Padre Obispo Gaspar Quintana Jorquera CMF, en su calidad de administrador apostólico de la diócesis de Copiapó y concelebrada por los Pbros. Aquiles Altamirano Herrera y Mario Campillay Morales, ex párrocos y hermanos diáconos Fernando Troncoso Mejías y Raúl López Vélez. Al inicio de la Eucariatía el diácono Juan Badilla Jeria, incardinado en esta parroquia, da lectura al decreto de nombramiento donde tomó posesión de la Parroquia San Pedro Apóstol de Huasco, la comunidad parroquial dio gracias a Dios y al padre obispo Gaspar, por el nuevo párroco.
Biografía:
Pbro. Enrique Vicente Sarneguet Pastor, nació en Valencia el 22 de enero de 1961, España, sus padres fueron Julio y Consuelo, su vocación religiosa nació en el seno de su familia, ingreso al seminario de Valencia, estudio filosofía y teología. Es ordenado sacerdote en la parroquia san Francisco de Borja de Valencia el 20 de julio de 1985. Ha desarrollado su labor pastoral en las parroquias de san Roque y san Sebastián de Alcoy (Alicante), parroquia de san Juan y Santiago de Montaverner (Valencia), San José Obrero de Vallenar, parroquia de santa María de Alcoy (Alicante), Parroquia de Nuestra Señora del Carmen de Alto del Carmen, parroquia de san Antonio Abad de Alginet (Valencia) y parroquia de Nuestra Señora del Rosario (Catedral de Copiapó). Aunque su labor ha sido fundamentalmente pastoral, también ha desempeñado labores de profesor de religión, director de colegios, fundador de algunas obras sociales: albergue de transeúntes, taller de reciclaje de ropa para mujeres gitanas, centro de rehabilitación de alcohol y drogas, casa de acogida de inmigrantes, radio profeta en Alto del Carmen, economato de alimentos de Cáritas.
El domingo 12 de octubre de 2014 en solemne Eucaristía presidida por el Padre Obispo Gaspar Quintana Jorquera CMF, en su calidad de administrador apostólico de la diócesis de Copiapó y concelebrada por los Pbros. Aquiles Altamirano Herrera y Mario Campillay Morales, ex párrocos y hermanos diáconos Fernando Troncoso Mejías y Raúl López Vélez. Al inicio de la Eucariatía el diácono Juan Badilla Jeria, incardinado en esta parroquia, da lectura al decreto de nombramiento donde tomó posesión de la Parroquia San Pedro Apóstol de Huasco, la comunidad parroquial dio gracias a Dios y al padre obispo Gaspar, por el nuevo párroco.
Biografía:
Pbro. Enrique Vicente Sarneguet Pastor, nació en Valencia el 22 de enero de 1961, España, sus padres fueron Julio y Consuelo, su vocación religiosa nació en el seno de su familia, ingreso al seminario de Valencia, estudio filosofía y teología. Es ordenado sacerdote en la parroquia san Francisco de Borja de Valencia el 20 de julio de 1985. Ha desarrollado su labor pastoral en las parroquias de san Roque y san Sebastián de Alcoy (Alicante), parroquia de san Juan y Santiago de Montaverner (Valencia), San José Obrero de Vallenar, parroquia de santa María de Alcoy (Alicante), Parroquia de Nuestra Señora del Carmen de Alto del Carmen, parroquia de san Antonio Abad de Alginet (Valencia) y parroquia de Nuestra Señora del Rosario (Catedral de Copiapó). Aunque su labor ha sido fundamentalmente pastoral, también ha desempeñado labores de profesor de religión, director de colegios, fundador de algunas obras sociales: albergue de transeúntes, taller de reciclaje de ropa para mujeres gitanas, centro de rehabilitación de alcohol y drogas, casa de acogida de inmigrantes, radio profeta en Alto del Carmen, economato de alimentos de Cáritas.
Exparrocos desde que fue erigida nuestra Parroquia San Pedro Apóstol
Agradecer al Señor de la vida y la esperanza, por enviarnos a estos hermanos sacerdotes que nos han evangelizado y acompañado, fortaleciendo nuestra fe a lo largo de toda nuestra historia como Parroquia, lo que se ha expresado ante todo en la Eucaristía. Cuanta gracia ha derrochado Dios para con nosotros, animando nuestra fe, y fortaleciendo a las familias Cristianas y a los hombres de buena voluntad, a través de estos hermanos, quienes nos han acompañado en el gozo, en la aflicción y en la esperanza, mostrándonos el rostro amoroso de Jesucristo, el Dios hecho hombre, quien nos invita a vivir en comunidad, es decir, en su Iglesia, sacándonos del aislamiento, para hacernos hermanos, teniendo presente que es en comunidad donde se fortalece la fe y la vida, lo que finalmente redunda en la familia, donde comienza la evangelización y brotan las vocaciones a la vida consagrada, sacerdotal, religiosa y laical. Gracias Señor, por todas las vocaciones que nos has entregado y las que nos sigues regalando...
Agradecer al Señor de la vida y la esperanza, por enviarnos a estos hermanos sacerdotes que nos han evangelizado y acompañado, fortaleciendo nuestra fe a lo largo de toda nuestra historia como Parroquia, lo que se ha expresado ante todo en la Eucaristía. Cuanta gracia ha derrochado Dios para con nosotros, animando nuestra fe, y fortaleciendo a las familias Cristianas y a los hombres de buena voluntad, a través de estos hermanos, quienes nos han acompañado en el gozo, en la aflicción y en la esperanza, mostrándonos el rostro amoroso de Jesucristo, el Dios hecho hombre, quien nos invita a vivir en comunidad, es decir, en su Iglesia, sacándonos del aislamiento, para hacernos hermanos, teniendo presente que es en comunidad donde se fortalece la fe y la vida, lo que finalmente redunda en la familia, donde comienza la evangelización y brotan las vocaciones a la vida consagrada, sacerdotal, religiosa y laical. Gracias Señor, por todas las vocaciones que nos has entregado y las que nos sigues regalando...
Templo y Capillas de la Parroquia San Pedro Apóstol de Huasco , la cual fue erigida como tal el año 1899
Catequesis Familiar
La Catequesis Familiar, es una instancia de evangelización única, donde generalmente hermanos (as) de diversas realidades de la vida eclesial, prestan generosos servicios, por amor a Dios y para que su Reinado se extienda entre nosotros, acompañando tanto a los padres como a los niños, que durante dos años se preparan, para recibir el Sacramento de la Eucaristía. Los ACN son los guía que acompañan a los niños en el proceso de catequizarlos. Los guías son hermanos (as) que acompañan a los padres en el proceso de catequizarlos. Todo este trabajo lo efectúan en estrecha comunión con nuestro párroco Pbro. Aquiles Altamirano Herrera, primer responsable de la vida de la Comunidad Parroquial. Es una hermosa misión, donde se evangeliza y se enseñan las verdades fundamentales de nuestra fe, que es la fe en Jesucristo resucitado, presente en nuestra realidad cotidiana. "Yo estoy con ustedes todo los días hasta el fin de la historia" (Mt. 28,20b).
Cumunidades Cristianas de Base (CCB)
Las CCB, es decir las Comunidades Cristianas de Base, son grupos de hermanos (as) que se reúnen por lo general en sus casas, para leer y meditar los textos de la Biblia, la Palabra de Dios, que ilumina nuestras vidas y nos hace ser discípulos (as) cada vez más comprometidos, más fieles al Señor Jesucristo, para dar testimonio del resucitado en la población o en el barrio donde vivimos, el Señor es quien da sentido a nuestras existencias...
La Catequesis Familiar, es una instancia de evangelización única, donde generalmente hermanos (as) de diversas realidades de la vida eclesial, prestan generosos servicios, por amor a Dios y para que su Reinado se extienda entre nosotros, acompañando tanto a los padres como a los niños, que durante dos años se preparan, para recibir el Sacramento de la Eucaristía. Los ACN son los guía que acompañan a los niños en el proceso de catequizarlos. Los guías son hermanos (as) que acompañan a los padres en el proceso de catequizarlos. Todo este trabajo lo efectúan en estrecha comunión con nuestro párroco Pbro. Aquiles Altamirano Herrera, primer responsable de la vida de la Comunidad Parroquial. Es una hermosa misión, donde se evangeliza y se enseñan las verdades fundamentales de nuestra fe, que es la fe en Jesucristo resucitado, presente en nuestra realidad cotidiana. "Yo estoy con ustedes todo los días hasta el fin de la historia" (Mt. 28,20b).
Cumunidades Cristianas de Base (CCB)
Las CCB, es decir las Comunidades Cristianas de Base, son grupos de hermanos (as) que se reúnen por lo general en sus casas, para leer y meditar los textos de la Biblia, la Palabra de Dios, que ilumina nuestras vidas y nos hace ser discípulos (as) cada vez más comprometidos, más fieles al Señor Jesucristo, para dar testimonio del resucitado en la población o en el barrio donde vivimos, el Señor es quien da sentido a nuestras existencias...
Bailes Religiosos de Nuestra Parroquia
En nuestra parroquia, existen las siguientes cofradías de Bailes Religiosos:
1) Gitano San Pedro, fundado el 29 de Junio de 1975, por las Sras. Nelly Jiménez y Lucia Santana, fue el primer Baile Religioso de nuestra parroquia.
2) Sambo Caporal Renacer con la luz María, fundado en Huasco Bajo 2013.
3) Sambo Caporal Peregrinos de María, fundado el 08 de Noviembre de 1990, por los Sres. Víctor Flores Calderón y Carlos Ojeda, con el apoyo de don Waldo Díaz.
4) Diablada de Huasco María de Lourdes, fundado el 02 de Febrero de 2004.
5) Morenada Nuestra Sra. del Rosario, fundado el 01 Mayo de 2010. Durante la Fiesta de San Pedro Apóstol de 2011, nuestro párroco Pbro. Aquiles Altamirano Herrera, efectuó la bendición de sus trajes, con los cuales se vestiran de fiesta para venerar a los Santos y Santas de Dios.
6) WUAKA TOKORIS, san Pedro Apóstol Huasco, fundado el 2014.
Estas cofradías de danzantes, son promesantes y a través del baile manifiestan su fe y agradecimiento a la Virgen María y a los Santos, son una manifestación de la piedad popular de nuestro pueblo latinoamericano. Ellos son comunidades que forman parte de la Comunidad parroquial, son autosuficientes, se organizan y realizan actividades durante todo el año, para costearse la movilización y estadía por el tiempo que duren las fiestas religiosas donde participan.
Algunas fiestas donde participan son La de Nuestra Señora de la Candelaria en Copiapó, Nuestra Señora del Rosario de Huasco Bajo, Cruz de Mayo en Vallenar, Sta. Rosa de Lima en Freirina y ciertamente nuestra fiesta local de San Pedro Apóstol de Huasco y Carrizal Bajo.
Estas cofradias cuentas con formadores permanentes, por lo tanto durante todo el año se les imparte formación, dado que conforman una autentica comunidad con carateristicas propias bien definidas.
En nuestra parroquia, existen las siguientes cofradías de Bailes Religiosos:
1) Gitano San Pedro, fundado el 29 de Junio de 1975, por las Sras. Nelly Jiménez y Lucia Santana, fue el primer Baile Religioso de nuestra parroquia.
2) Sambo Caporal Renacer con la luz María, fundado en Huasco Bajo 2013.
3) Sambo Caporal Peregrinos de María, fundado el 08 de Noviembre de 1990, por los Sres. Víctor Flores Calderón y Carlos Ojeda, con el apoyo de don Waldo Díaz.
4) Diablada de Huasco María de Lourdes, fundado el 02 de Febrero de 2004.
5) Morenada Nuestra Sra. del Rosario, fundado el 01 Mayo de 2010. Durante la Fiesta de San Pedro Apóstol de 2011, nuestro párroco Pbro. Aquiles Altamirano Herrera, efectuó la bendición de sus trajes, con los cuales se vestiran de fiesta para venerar a los Santos y Santas de Dios.
6) WUAKA TOKORIS, san Pedro Apóstol Huasco, fundado el 2014.
Estas cofradías de danzantes, son promesantes y a través del baile manifiestan su fe y agradecimiento a la Virgen María y a los Santos, son una manifestación de la piedad popular de nuestro pueblo latinoamericano. Ellos son comunidades que forman parte de la Comunidad parroquial, son autosuficientes, se organizan y realizan actividades durante todo el año, para costearse la movilización y estadía por el tiempo que duren las fiestas religiosas donde participan.
Algunas fiestas donde participan son La de Nuestra Señora de la Candelaria en Copiapó, Nuestra Señora del Rosario de Huasco Bajo, Cruz de Mayo en Vallenar, Sta. Rosa de Lima en Freirina y ciertamente nuestra fiesta local de San Pedro Apóstol de Huasco y Carrizal Bajo.
Estas cofradias cuentas con formadores permanentes, por lo tanto durante todo el año se les imparte formación, dado que conforman una autentica comunidad con carateristicas propias bien definidas.
HISTORIA DE NUESTRA IGLESIA PARROQUIAL SAN PEDRO APOSTOL
El templo parroquial San Pedro Apóstol, se erige con su forma característica de un barco. Su construcción data del año 1976.
El 1980 se realizó la bendición y consagración del nuevo templo parroquial, por quien fuera entonces nuestro Obispo Monseñor Fernando Ariztía Ruiz, hoy en el Reino participando del gozo de su Señor. Su forma de barco nos recuerda el mandato de Jesús a sus discípulos: "Echen la red a la derecha y encontraran pesca." Jn 21,6. Nuestro Señor Jesucristo es el único capitán, que dirige esta barca hacia océanos de eternidad y su tripulación vamos confiados y alegres, sabiéndonos guiados por Él.
Nuestro actual templo parroquial San Pedro Apóstol, es uno de los íconos más representativos de Huasco y de la Región de Atacama, ya que es único por su arquitectura y por sus 21 hermosos vitrales, alusivos a la vida del Apóstol San Pedro, el pescador del lago de Galilea y primer Papa.
La presencia de la Iglesia en este puerto de la región de Atacama, data del 1880, cuando un grupo de católicos, decidieron instalar una cruz sobre la torre de un templo, que construyó una familia inglesa con el fin de dar culto a sus creencias, y como nunca lo usaron, lo cedieron a la comunidad católica huasquina. Es así como el 29 de junio de 1899 es erigida como parroquia y bendecida por Monseñor Florencio Fontecilla, Obispo de La Serena y a partir de esa fecha, este templo comienza a realizar funciones propias de una parroquia, bajo la protección de San Pedro Apóstol, siendo su primer párroco el Pbro. Enrique del Canto.
El templo parroquial San Pedro Apóstol, se erige con su forma característica de un barco. Su construcción data del año 1976.
El 1980 se realizó la bendición y consagración del nuevo templo parroquial, por quien fuera entonces nuestro Obispo Monseñor Fernando Ariztía Ruiz, hoy en el Reino participando del gozo de su Señor. Su forma de barco nos recuerda el mandato de Jesús a sus discípulos: "Echen la red a la derecha y encontraran pesca." Jn 21,6. Nuestro Señor Jesucristo es el único capitán, que dirige esta barca hacia océanos de eternidad y su tripulación vamos confiados y alegres, sabiéndonos guiados por Él.
Nuestro actual templo parroquial San Pedro Apóstol, es uno de los íconos más representativos de Huasco y de la Región de Atacama, ya que es único por su arquitectura y por sus 21 hermosos vitrales, alusivos a la vida del Apóstol San Pedro, el pescador del lago de Galilea y primer Papa.
La presencia de la Iglesia en este puerto de la región de Atacama, data del 1880, cuando un grupo de católicos, decidieron instalar una cruz sobre la torre de un templo, que construyó una familia inglesa con el fin de dar culto a sus creencias, y como nunca lo usaron, lo cedieron a la comunidad católica huasquina. Es así como el 29 de junio de 1899 es erigida como parroquia y bendecida por Monseñor Florencio Fontecilla, Obispo de La Serena y a partir de esa fecha, este templo comienza a realizar funciones propias de una parroquia, bajo la protección de San Pedro Apóstol, siendo su primer párroco el Pbro. Enrique del Canto.
Con el pasar de los años el templo comenzó a deteriorarse. El 1976 se inicia el proyecto de construcción de un nuevo templo sobre el mismo lugar donde estaba el antiguo, testigo de importantes celebraciones eucarísticas, bautizos, matrimonios, funerales y grandes acontecimientos de la fe por más de 96 años. Gracias al esfuerzo de toda la Comunidad huasquina, guiados por quien fuera el párroco de entonces Pbro. Manuel Amboú Montero, misionero valenciano, quien llego a la parroquia el 1968 y las Religiosas de la Congregación de Jesús, María y José, misioneras españolas.
El Pbro. Manuel Amboú Montero, fue párroco desde 1968 al 1987, después de los cual retorna a su querida Valencia, España. Hoy ya se encuentra en el Reino, participando del gozo de su Señor. En la actualidad el templo se encuentra en un proyecto de ampliación, para atender de mejor forma a la Comunidad Cristiana, siempre creciente por la llegada de nuevas familias a la parroquia, producto de la diversas empresas que han llegado, para construir y realizar ampliaciones de nuevos proyectos en la zona. Desafío para toda la Iglesia parroquial, hay que anunciar el mensaje del Señor Jesucristo, el Evangelio, la Buena Noticia, mediante la misión que tiene que ser a tiempo y a destiempo...
El Pbro. Manuel Amboú Montero, fue párroco desde 1968 al 1987, después de los cual retorna a su querida Valencia, España. Hoy ya se encuentra en el Reino, participando del gozo de su Señor. En la actualidad el templo se encuentra en un proyecto de ampliación, para atender de mejor forma a la Comunidad Cristiana, siempre creciente por la llegada de nuevas familias a la parroquia, producto de la diversas empresas que han llegado, para construir y realizar ampliaciones de nuevos proyectos en la zona. Desafío para toda la Iglesia parroquial, hay que anunciar el mensaje del Señor Jesucristo, el Evangelio, la Buena Noticia, mediante la misión que tiene que ser a tiempo y a destiempo...
La Comunidad Parroquial San Pedro Apóstol de Huasco, perteneciente a la Diócesis de Copiapó, ubicada en la Región de Atacama Chile, siendo nuestro actual Obispo Monseñor Celestino Aós Braco, O.F.M.Cap., nuestro párroco es el Pbro. Enrique Sarneguet Pastor, quien pastorea en esta porción de la Iglesia que peregrina aquí en Huasco e igualmente se unen a la misión la hna. Cristina Cid, misionera laica consagrada al Señor y el Diácono Permanente Juan de Dios Badilla Jeria.
La Comuna de Huasco, se encuentra a unos 57 kilómetros al poniente de la ciudad de Vallenar y se emplaza en una amplia bahía rodeada de cerros, con hermosas playas entre la que se encuentra la Playa Chica, que se ubica al borde de la costanera, principal centro de esparcimiento familiar y turístico. Más allá, donde termina el valle del Huasco, se encuentra la Playa Grande, la que posee finas arenas doradas y tiene una extensión de varios kilómetros de longitud e igualmente en su parte intermedia desemboca el Río Huasco, esto solo durante los deshielos ó inundaciones derivadas de lluvias que se manifiestan con fuerza cada cinco años y con mayor intensidad cada diez años, las cuales permiten la manifestación del desierto florido, fenómeno único en el mundo. El río, la mayor parte de los años, sus escasas aguas son bloqueadas por las arenas del mar, las cuales forman grandes dunas, esto permite el desarrollo de un humedal importante, donde habitan aves de todo tipo y sirve de estación alimenticia para numerosas aves migratorias, entre ellas flamencos y cisnes de cuello negro entre otras.
La parroquia, está compuesta por seis Capillas, las cuales son: Nuestra Señora del Rosario de Huasco Bajo y Ntra. Sra. del Camino de la Arena Huasco Bajo, San Luis del Plan 45, Sagrada Familia de Población O’Higgins, Santa Teresa de Los Andes de la Población Coopermín, San Pedro de Carrizal Bajo, "Jesús El Buen Pastor" de Canto de Agua. También una comunidad en misión denominada llanos del Lagarto.Todo el territorio que compone la parroquia, se encuentra ubicado en la placa del borde costero. En este puerto balneario, donde está inserta nuestra parroquia, tiene una población actual de 8.000 habitantes. Posee un Terminal Pesquero muy característico, donde se ofrece una gran variedad de productos del mar, extraídos por pescadores artesanales, cuyas prácticas se remontan a los tiempos de los autóctonos pescadores Changos.
La Comuna de Huasco, se encuentra a unos 57 kilómetros al poniente de la ciudad de Vallenar y se emplaza en una amplia bahía rodeada de cerros, con hermosas playas entre la que se encuentra la Playa Chica, que se ubica al borde de la costanera, principal centro de esparcimiento familiar y turístico. Más allá, donde termina el valle del Huasco, se encuentra la Playa Grande, la que posee finas arenas doradas y tiene una extensión de varios kilómetros de longitud e igualmente en su parte intermedia desemboca el Río Huasco, esto solo durante los deshielos ó inundaciones derivadas de lluvias que se manifiestan con fuerza cada cinco años y con mayor intensidad cada diez años, las cuales permiten la manifestación del desierto florido, fenómeno único en el mundo. El río, la mayor parte de los años, sus escasas aguas son bloqueadas por las arenas del mar, las cuales forman grandes dunas, esto permite el desarrollo de un humedal importante, donde habitan aves de todo tipo y sirve de estación alimenticia para numerosas aves migratorias, entre ellas flamencos y cisnes de cuello negro entre otras.
La parroquia, está compuesta por seis Capillas, las cuales son: Nuestra Señora del Rosario de Huasco Bajo y Ntra. Sra. del Camino de la Arena Huasco Bajo, San Luis del Plan 45, Sagrada Familia de Población O’Higgins, Santa Teresa de Los Andes de la Población Coopermín, San Pedro de Carrizal Bajo, "Jesús El Buen Pastor" de Canto de Agua. También una comunidad en misión denominada llanos del Lagarto.Todo el territorio que compone la parroquia, se encuentra ubicado en la placa del borde costero. En este puerto balneario, donde está inserta nuestra parroquia, tiene una población actual de 8.000 habitantes. Posee un Terminal Pesquero muy característico, donde se ofrece una gran variedad de productos del mar, extraídos por pescadores artesanales, cuyas prácticas se remontan a los tiempos de los autóctonos pescadores Changos.
Horarios Normales de las Eucarísticas durante el año en Parroquia San Pedro Apóstol de Huasco.
Capilla Santa Teresa de Los Andes
Sábados 20:00 Hrs.
Capilla San Luis
Sábados 18:00 Hrs.
Templo Parroquial San Pedro Apóstol
Domingo 12:00 Hrs. Eucaristía
Capilla Ntra. Señora del Rosario de Huasco Bajo
Domingos 10:00 Hrs.
Capilla Ntra. Sra. del Camino de la Arena Huasco Bajo
Una vez al mes
Capilla Sagrada Familia
Domingos 20:00 Hrs.
Capilla San Pedro Apóstol de Carrizal Bajo
Miércoles 16:00 Hrs. (Eucaristía)
Secretaria Parroquial Srta. Marisol
Horarios de atención Oficina Parroquial
Lunes, Miércoles y Viernes 10:00 a 13:00 Hrs.
Martes, Jueves y Sábado de 16:00 a 20:00 Hrs
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Galeria Parroquia San Pedro Apóstol
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Por cualquier información o consulta relacionada con nuestro quehacer pastoral y servicios relacionados relacionados, puede consultar a traves de esta opción de email y gustosos le atenderemos
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